¿Tienes piel grasa y aún crees que no necesitas hidratación o que el sol es beneficioso? ¡Es momento de desterrar esos mitos! En Clínica Dra. Cañete, te explicamos por qué muchas de las creencias populares sobre la piel grasa son erróneas y cómo puedes cuidar tu piel de forma eficaz.
Mito: “Los productos para piel grasa deben ser agresivos”
Nada más lejos de la realidad. Los productos muy agresivos pueden deshidratar tu piel y desencadenar una sobreproducción de sebo.
Solución: Elige limpiadores suaves y exfoliantes con ingredientes como el ácido salicílico, que limpian en profundidad sin resecar.
Mito: “Si tienes piel grasa, no necesitas hidratante”
Aunque produzcas más sebo, tu piel puede estar deshidratada. La deshidratación genera aún más grasa.
Solución: Usa hidratantes ligeros, sin aceites y con base acuosa para mantener el equilibrio.
Mito: “La piel grasa no envejece”
Es cierto que tiene más colágeno, pero también puede envejecer con manchas, pérdida de firmeza y arrugas.
Solución: Incorpora antioxidantes, vitamina C, retinol y péptidos para prevenir el envejecimiento cutáneo.
Mito: “El sol es bueno para la piel grasa”
Aunque puede parecer que el sol «seca» la piel grasa y mejora su apariencia, la realidad es otra. La exposición prolongada a los rayos UV deshidrata la piel, lo que provoca un efecto rebote: tu piel produce aún más grasa para compensarlo. Además, el sol puede agravar imperfecciones, causar manchas y acelerar el envejecimiento cutáneo.
Solución: Utiliza siempre un protector solar específico para pieles grasas, de textura ligera y no comedogénico. Así protegerás tu piel sin obstruir los poros.
¿Tienes dudas sobre tu tipo de piel o los productos que debes usar?
Nuestro equipo especializado en medicina estética pueden ayudarte a crear una rutina personalizada para lograr una piel sana, equilibrada y luminosa.
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